viernes, 3 de noviembre de 2023

BEN SHAHN. De la no conformidad

 

Llegamos al Museo Nacional Reina Sofía, al encuentro por segunda vez, de la espléndida exposición del artista Ben Shahn (Kaunas, Lituania, 1898- Nueva York, 1969), es la primera retrospectiva en España y la primera antológica suya que se realiza en Europa desde 1963. Comisaria, Laura Katzman. Organizada por el Museo Reina Sofía. Reúne cerca de 200 obras procedentes de 50 museos (entre ellos el Museo Whitney y el Moma de Nueva York), galerías. Archivos y colecciones privadas de Estados Unidos y de España, así como abundante material documental y fotografías originales del Smithsonian Institution’s Archives of American Art y el Harvard Art Museums.

Ben Shahn, reconocido como uno de los grandes representantes del realismo social estadounidense y como un acérrimo defensor de la justicia social, la exposición repasa el polifacético trabajo de este inmigrante de clase trabajadora de una familia judía, quien se preocupó de los asuntos trascendentales de la historia del siglo XX, como la Gran Depresión y el New Deal en estados Unidos; el ascenso del fascismo europeo; la barbarie de la II Guerra Mundial; el Macartismo y la represión de las libertades individuales durante la Guerra Fría; la amenaza de aniquilación nuclear en la era atómica; y las luchas por los derechos laborales, civiles y humanos cuando los movimientos de descolonización habían empezado a extenderse por todo el planeta y, ya al final de su vida la guerra de Vietnam. También sus trabajos más líricos y espirituales, que a menudo incorporan pasajes de la biblia hebrea, portan un contenido social.

En los años cincuenta Ben Shahn fue un artista de enorme popularidad llegando a representar a los Estados Unidos, junto a William de Kooning, en la bienal de Venecia de 1954 y fue objeto de numerosas exposiciones, programas de televisión y publicaciones. Es un momento, sin embargo, de primicia del expresionismo abstracto y otras formas de arte no objetivo, por lo que Shahn comenzó a perder el favor de la crítica en una época marcada también por la Guerra Fría.

La exposición es inmensa, consta de ocho apartados con gran contenido de su ideario y trabajo, de los que comentaremos algunos, todos tienen gran interés.

Arte y activismo

Caminamos por la muestra, la primera de las salas aborda el trabajo de Ben Shahn en los años treinta cuando, tras haberse formado en litografía y emular el modernismo de Cézanne, Picasso y la Escuela de París, su obra vira hacia al realismo y crece su compromiso político. Comienza también a dibujar a partir de fotografías de noticias, una de las características de su método de trabajo en toda su trayectoria que puede observarse en muchas vitrinas de la exposición.

Es la época de la crisis económica provocada por la Gran Depresión de octubre de 1929 y el artista se dedica a denunciar con acuarelas y gouaches casos célebre de procesos judiciales: el proceso del capitán francés Alfred Dreyfus -que fue víctima del antisemitismo entre 1894 y 1906- y de dos inmigrantes italianos de clase trabajadora ejecutados en Massachusetts en 1927 por un asesinato que muchos creen que no cometieron. Este caso está representado aquí en la monumental obra La Pasión de Sacco y Vanzetti (1931-1932).

Fotografías documentales

En los años 30, Shahn se aficionó a la fotografía, buscando una estética de reportaje y detalles “auténticos” para su pintura de realismo social. Con una Laica de 35 mm.  e inspirado por su compañera Bernarda Bryson, el artista fotografió de forma espontánea en Nueva York a ciudadanos en las calles, a jóvenes encarcelados en prisiones, y artistas activistas que se manifestaban para conseguir puestos de trabajo utilizando su arte como arma en lucha de clases. Al igual que ocurrió con las fotografías de los periódicos, comenzó a utilizar desde entonces, las suyas propias como elemento recurrente de sus pinturas y posters. Este apartado es inmenso.

Murales públicos

La siguiente sala está dedicada los murales de Ben Shahn, quien aprovechó los proyectos artísticos del New Deal y las oportunidades que ofrecían a los artistas de dirigirse a un público amplio en oficinas de correos y otros edificios oficiales de todo el país. El mural más exitoso y prestigioso de Shahn, El significado de la Seguridad Social (1940-1942), fue encargado por la Sección de Bellas Artes para el entonces Edificio de Seguridad Social de Washington D.C. Shahn incluyó a aquellos a los que ayudaría la Ley de Seguridad Social de New Deal, como desempleados, ancianos y discapacitados.

Los carteles de Shahn -con figuras de manos macizas y trabajadoras- hablan de la dignidad del trabajo manual y de los valores de Shahn como hijo y nieto de talladores de madera y artesanos. Un ejemplo son los gráficos que Shahn creó para la campaña de reelección de Franklin Delano Roosevelt en 1944, que retratan al presidente como amigo de los sindicatos y promueve la cooperación interracial en el trabajo. For Full Employment After the War: Register Vote, por ejemplo, muestra a un soldador blanco y otro negro trabajando juntos.

La Guerra Fría: McCartismo y la era atómica

El arte y la política de Shahn fueron objeto de ataques en el opresivo clima político de principios de la Guerra Fría. El temor de los estadounidenses a la amenaza soviética se vio exacerbado por la persecución comunista, liberales y progresistas por parte del senador Joseph McCarthy y sus acólitos. El propio Shahn fue perseguido por el FBI por su pacifismo.

De forma paralela, Shahn también respondió a la amenaza nuclear con obras alegóricas de formas abstractas como Second Allegory (1953), en el que una figura es atacada por un enorme dedo acusador rodeado por llamas rojas, sugiriendo los peligros inminentes de las bombas atómicas.

Igual de inquietantes son sus representaciones de “botánicos ciegos”, científicos inmersos en sus teorías, amenazados físicamente por sus experimentos o estructuras moleculares. Shahn retrató a los famosos físicos teóricos Albert Einstein y J. Robert Oppenheirmer, a quienes conocía y admiraba por oponerse en última instancia a las armas nucleares por motivos morales.


Derechos civiles y anticolonialismo

Shahn dibujó al icónico de la no violencia Martin Luther King como un fascinante activista de los derechos civiles y laborales en el transcurso de una conmovedora oratoria, que contrasta con la imagen desradicalizada que se tiene de King en la actualidad.

Retrató a King en marzo de 1965, poco después del “Domingo Sangriento”, cuando los activistas que marchaban de Selma a Montgomery (Alabama) fueron brutamente golpeados por la policía y los residentes blancos de Selma. Reutilizada para una litografía con un extracto del último discurso de King antes de su asesinato el 4 de abril de 1968, la imagen se utilizó en una campaña de recaudación de fondos.

Las últimas secciones de la exposición abordan la espiritualidad y la identidad, y revelan el retorno de Shahn a las historias bíblicas y los textos hebreos que tan bien conocía de niño.

Obras como Identidad (1968) ejemplifican los últimos cuadros de Shahn: los brazos levantados y las manos entrelazadas expresan tanto la elevación espiritual como la protesta terrenal contra la guerra de Vietnam. Pinceles en flor (1968) cierra la exposición con una nota filosófica: una reflexión sobre el papel del artista en la sociedad.

Hace algún tiempo que no disfrutábamos de una exposición tan completa.

© Mariví Otero 2023
Manuel Otero Rodríguez

Fuente: Ben Shahn. De la no conformidad. Museo Nacional Reina Sofía. 4 de octubre 2023 al 26 de febrero de 2024. Gabinete de Prensa Museo Reina Sofí: Documentación y fotografías.

1 comentario:

  1. no hay que perderse esta exposición porque no volveremos a ver este artista. besos.

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