miércoles, 21 de febrero de 2024

J.M. PEREÑÍGUEZ. ESA SOLA SEÑAL

Exposición: J.M. PEREÑÍGUEZ. ESA SOLA SEÑAL. Galería Rafael Ortiz.

En la Galería Rafael Ortiz (Sevilla) se ha inaugurado hace unos días la exposición del artista José Miguel Pereñíguez (Sevilla 77): "Esa sola señal".

Pereñíguez escribe: "Tal vez fuese Navalis (escritor, filósofo alemán) quien escribiera el más hermoso y conciso tratado de dibujo  cunado comparaba los caminos y los destinos de los hombre con "aquella escritura difícil y caprichosa que se encuentra en todas partes:  sobra las alas,  sobre la cáscara de los huevos, en las nubes en la nieve,  en los cristales, en la configuración de las rocas, sobre el agua congelada, dentro y fuera de las montañas, de las plantas, de los animales,  de los hombres,  en los resplandores  de los cielos, sobre los  discos de vidrio y resina, cuando se frotan y se palpan; en las limaduras que se adhieren  al imán y en las extrañas conjeturas  del azar..."

Exposición: J.M. PEREÑÍGUEZ. ESA SOLA SEÑAL. Galería Rafael Ortiz.

Trazando o estampando, los signos de esta escritura determinan un orden en lo humano (los caminos Novalis), empezando por hacernos quienes somos (Las líneas de la fisonomía, de la expresión), revelándonos de seguido dónde estamos. El dibujo hace con esa escritura lo posible y lo imposible: dejarnos ser y no ser nosotros, indicarnos la vía hacia  donde querríamos  estar y no estar. Exposición para visitar hasta el 27 de marzo.

Exposición: J.M. PEREÑÍGUEZ. ESA SOLA SEÑAL. Galería Rafael Ortiz.

© Mariví Otero 2024

Fuente: Documentación y fotografías: Galería Rafael Ortiz. Sevilla.

CHRISTER STRÖMHOLM. Cierra los ojos y ve.


Christer Strömholm. Autorretrato, Camarga, 1951. © Christer Strömholm Estate

En la Fundación Mapfre Madrid, visitamos la exposición retrospectiva del fotógrafo sueco Christer Strömholm (Estocolmo 1916 - 2002).

Tras un suceso familiar como fue la pérdida de su padre, este suceso, unido a su participación en la guerra civil española y en la Segunda Guerra mundial, dejó una fuerte huella en su vida y su obra que estará imbuida de humanismo y compromiso social, lo que combina con un cierto carácter documental. Como él mismo al referirse a la guerra en su libro Poste restante: “Después de un periodo infernal, tiendes a aislarte mucho, a no soltar prenda Ni siquiera delante de tu círculo más cercano, de la gente con la que te relacionas íntimamente, son muchas las conferencias que salen de tus labios. Te conviertes en un charlatán, alguien que cuenta anécdotas entretenidas, que anima las veladas, pero nunca revelas realmente nada”.

 Desde muy joven, Strömholm había viajado por todo el mundo. Tras la guerra, en 1947, volvió a París, donde se dio cuenta de que la imagen fotográfica le permitía expresarse de una forma acorde a sus deseos, momento a partir del cual ya no dejaría de hacer imágenes; según sus propias palabras: “Yo no hago fotografías, hago imágenes. Eso es lo que he hecho. Eso es lo que he hecho toda la vida”. 


Christer Strömholm. Tánger, 1952. Impresión posterior. N. inv. 0395-6. © Christer Strömholm Estate

Caminamos por la muestra dividida en cinco secciones:

FOTOFORM

A partir de 1950, y tras conocer a Otto Steiner, fundador del colectivo fotográfico Fotoform, Strömholm comenzó a participar en las exposiciones colectivas del grupo tanto en Europa como en Estados Unidos. Los miembros de Fotoform se centraban en la experimentación formal y en las posibilidades expresivas del lenguaje fotográfico: crearon un método que bautizaron como fotografía subjetiva.

Su paso por el grupo le ayudó a establecer cuáles eran sus objetivos en el arte fotográfico, sin embargo, tras unos años, el artista abandonó el colectivo.

Christer Strömholm. El pequeño Christer, Pigalle, . París, 1955 . Impresión posterior. N. inv. 0066-68. © Christer Strömholm Estate

POSTE RESTANTE

La vida errante de Strömholm y sus viajes por España, Japón, Francia, Alemania, Estados Unidos y la India desde finales de la década de 1940 hasta 1967 quedaron reflejadas en el libro Poste restante (Lista de correos), editado en 1957. Las imágenes en torno a la muerte, sobre las que el artista había trabajado desde 1950, ocuparon un lugar central en la publicación y se convirtieron en un modo para procesar sus recuerdos de infancia, en concreto la separación de sus progenitores, el suicidio de su padre y las experiencias bélicas.

Poste restante es considera hoy en día una de las publicaciones clave sobre la fotografía de posguerra y se erige como una reflexión acerca de la condición humana.

Christer Strömholm. Tokio, 1961 . Copia de época. N. inv. 0357-8. © Christer Strömholm Estate

LA PLACE BLANCHE

A finales de los años cincuenta, Strömholm entablo amistad en París con las transexuales de los alrededores de la Place Blanche, cerca de Pigalle. La mayor parte de ellas trabajaban en cabarés y se veían obligadas a prostituirse dada la imposibilidad de encontrar alternativas laborales, entre otras cosas, porque su nombre masculino en el carné de identidad no coincidía con su físico.

“Las amigas de la place Blanche”, que dieron título al libro que publicaría en 1983, reivindicando el derecho a ser ellas mismas; sus retratos hablan de la libertad y del poder de determinar la propia identidad.

Christer Strömholm. Gina y Nana, Place Blanche, París, 1963. Impresión posterior. N. inv. 0120-23. © Christer Strömholm Estate

Christer Strömholm. La Méthode, París, 1960. Impresión posterior. N. inv. 0076-12. © Christer Strömholm Estate

Christer Strömholm. Jacky y Adèle Chanel, París, 1960. Impresión posterior. N. inv. 0081-8. © Christer Strömholm Estate

EL PARÍS DE LOS ARTISTAS

En 1937 Strömholm visitó por primera vez París, donde pudo asistir a la Exposición Universal, que albergaba el pabellón republicano español en el que se exhibía el Guernica de Pablo Picasso. París se convirtió en uno de sus destinos preferidos. Regresó en 1947 y se codeó con algunos de los más destacados artistas de la época. Su principal fuente de inspiración fue Brassaï, con quien compartía el interés por los fragmentos de textos, los escritos en las fachadas a modo de grafiti, pero también en las señales los carteles y las vallas publicitarias.

En 1949, el fotógrafo comenzó una serie de retratos de artistas para periódicos brasileños y suecos. Descubrió que tenía talento para adentrarse en la personalidad de los retratados: Le Corbusier, André Breton, Antoni Tàpies, Antonio Saura, Alberto Giacometti, por citar algunos.

Christer Strömholm. Marcel Duchamp, Cadaqués, 1963. Impresión posterior. N. inv. 0006-21. © Christer Strömholm Estate

Christer Strömholm. Alberto Giacometti, París, 1960. Impresión posterior. N. inv. 0007-31. © Christer Strömholm Estate

Christer Strömholm. Leo Zimmerman, París, 1949. Impresión posterior. N. inv. 0086-8. © Christer Strömholm Estate

ESPAÑA

Strömholm llegó a España en 1938, en plena guerra civil cuando contaba veinte años, lo que supuso el despertar de su conciencia política, pues actuó ocasionalmente como correo de los republicanos. A finales de los años cincuenta regresó de nuevo a España, esta vez como guía turístico de viajes que partían en autobús desde Suecia. Visitó entonces lugares como Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca y Valencia. Este trabajo le proporcionó la ocasión de fotografiar ambientes urbanos, prostitutas, guardias civiles, marines norteamericanos y niños.

Muchos años después, en 2013, se publicó el libro Resa i svartvitt (Viaje en blanco y negro), en el que relató cómo experimentaron la realidad social del país bajo el régimen franquista.

Las imágenes del viaje ofrecen una imagen de pobreza, capturan la atmósfera de zonas donde el progreso parece detenido. Algunos de los retratos más legendarios de niños proceden de estos recorridos por el país.

Christer Strömholm. Barrio Chino, 1959. Copia de época. N. inv. 0670-6 / ESP 048. © Christer Strömholm Estate

Christer Strömholm. Barrio Chino, Barcelona, 1959. Copia de época. N. inv. 0014-16. © Christer Strömholm Estate

Christer Strömholm. Palma de Mallorca, 1959. Impresión posterior. N. inv. 0079-10. © Christer Strömholm Estate

Gran exposición de uno de los artistas más emblemáticos de la fotografía europea de posguerra, cuyo mayor reconocimiento le llegó de forma algo tardía, cuando le fue otorgado en 1997 el Premio Hasselblad.

La muestra cuenta con más de ciento cincuenta imágenes y distinta documentación de archivo, entre la que se encuentra la película Blunda och se (Cierra los ojos y ve), realizada por Joakim Strömholm en 1996. Importante ver este documental que está en la última sala, para conocer al artista fotógrafo sueco y libertario Christer Strömholm.

Christer Strömholm, 1992. © Christer Strömholm Estate

© Mariví Otero 2024
Manuel Otero Rodríguez.

Fuente: Christer Strömholm. Fundación Mapfre Madrid. Comisaria: Estele af Malmborg. Documentación y fotografía de la Fundación Mapfre: Alejandra Fernández Martínez. Del 2 de febrero al 5 de mayo 2024.

viernes, 9 de febrero de 2024

TÀPIES. Centenario


Caja con cesta 1999. Bronce pintado 83 x 131 x 42 cm. Ejemplar único fundido en la Fundición Barberí, Ruidellots.

Visitamos la Galería Leandro Navarro, al encuentro de la exposición homenaje a Antoni Tàpies (Barcelona, 1923-2012), en el marco del centenario de su nacimiento, uno de los artistas más relevantes del siglo XX.

Nos paseamos por una selección de 17 obras que abarcan el período de 1955 al 2000, pintura, escultura y un gran tapiz. Antoni Tàpies, la pureza de su forma de componer desde una libertad medida, ante su obra, pienso ¡Tàpies es velazqueño! Sigo la visita acompañada de Iñigo Navarro, gran conocedor de la obra del maestro como lo es su padre Leandro Navarro (hoy jubilado). Le comento que coinciden el Centenario de Antonio Tàpies, con el del crítico de arte José María Moreno Galván (La Puebla de Cazalla, Sevilla 1923-1981, Madrid), ambos eran grandes amigos. En el Museo de Arte Contemporáneo José María Moreno Galván en La Puebla de Cazalla (Sevilla), se está celebrando su centenario, con una gran muestra “Desde los afectos” con obras de la colección de su hija Carola Moreno Torres y donde se pueden ver obras de Tàpies.

Moreno Galván (1) escribe: “El arte de alusiones primigenias de Antoni Tàpies incorpora a la modernidad por la operación del extrañamiento. Lo que nos fascina de las expresiones primitivas es que ellas son el testimonio de la dualidad entre el hombre y el mundo. Lo que nos fascina en el arte de Tàpies, también. Sólo que en el arte de Tàpies, la palabra dualidad podría ser sustituida correctamente por la palabra alineación. Para esa operación ha necesitado desasimilarse de lo cotidiano, ver a lo cotidiano con los ojos de la extrañeza. Así, unas sillas, una mujer reclinada o un sombrero invertido adquieren un carácter fantasmal, como de mitos. Son efectivamente, porque el mito no es otra cosa que la iluminación de la realidad: no la realidad figurada sino de la realidad significada; en este caso, no de unas sillas, una mujer reclinada o un sobrero invertido, sino de su extraña reencarnación: de la alineación.

¿Rechaza Tàpies a los valores de la civilización actual? Claro está que los rechaza, pero en tanto que valores alienantes. En el mundo de hoy, él es uno de los pocos artistas que está predicando la necesidad de la conversión en “cosa” de todos los elementos mistificados de la civilización del consumo, o bien, la necesidad de rescatar de su condición de “cosa” a ese hombre que no es sujeto sino objeto de la historia.

La obra de Tàpies es como una respuesta a la pregunta que necesariamente se plantea el hombre de hoy a la vista de la aparente contradicción sensitiva de nuestro tiempo, que consiste, de una parte, en sentirse identificado con todas las características visibles de la modernidad más rigurosa y, de otra, en sentirse sensitivamente ligado a todas las expresiones más bárbaras y genuinas de la primitividad más extremada. Es que el argumento esencial de la pintura de Tàpies podría ser enunciado de la siguiente manera: nuestro tiempo es la prehistoria de un nuevo mundo”.  

Color arpillera y alambres. 1972. Realizada en colaboración con Josep Royo. Tapiz con alambre. Tapiz: 210 x 170 cm. Panel trasero: 260 x 204 x 21 cm

El catálogo de la exposición incluye textos de Toni Tàpies, hijo del artista, de Núria Homs -conservadora de la Fundación Tàpies- y entrevista realiza por Manuel J. Borja-Villel, A modo de introducción: Una conversación con Antonio Tàpies en 1995 en la que descubrir más sobre su proceso y filosofía de trabajo.

Toni Tàpies escribe (2) “En la exposición de la Galería Leandro Navarro podemos sin duda contemplar muchos de estos registros tapianos. Entre las diferentes obras que se exponen, me parece de singular importancia, y esto es un criterio muy personal, la pintura titulada A la pintura. Tàpies fu siempre un gran defensor de la pintura, aunque algunos piensan erróneamente que su obra la destruye. En este cuadro, la referencia a la pintura queda patente, no solo en el título sino bien claramente en la propia obra”.

A la pintura 1989. Óleo y lápiz sobre madera 175 x 100 cm

Núria Homs escribe (3) “Hay una doble vertiente en toda la obra de Tàpies. Por un lado, una actitud de rebeldía que empuja y anima a la lucha: al dar valor a lo más simple -la paja, el polvo, la caja de madera, las partes del cuerpo menos atractivas-, Tàpies denuncia el funcionalismo excesivo y la primacía de la producción excesiva y la acumulación de bienes, típicos del capitalismo, que se manifiesta en su interés en esas sustancias, objetos o hábitos rechazados por la sociedad”.

Óvalo y objetos 2000. Técnica mixta sobre madera 97 x 130 cm

Espléndida exposición, el recorrido por Tàpies. Centenario subraya la capacidad del artista para la pervivencia de sus propias fórmulas.


© Mariví Otero 2024
Manuel Otero Rodríguez.

Fuente: (1) Moreno Galván. J.M. La última vanguardia. 1969 By MAGIUS, S.A. Deposito Legal B40.148-1968. pp.56-60.

(2) Toni Tàpies, A la Pintura. Tapies. Centenario. Madrid: Galería Leandro Navarro, 2024. p. 8

(3) Núria Homs, Tàpies, espigador y prestidigitador. Tàpies. Centenario. Madrid: Galería Leandro Navarro. 2024. pp. 14-15.

Documentación y fotografías, prensa Galería: Esther Rodríguez Cámara y Lourdes Varela.

EQUIPO CRÓNICA

 

SIN TÍTULO, 1966. Acrílico sobre tablero de fibras montado sobre bastidor. 55 x 74 cm

Hace unos dias visité la exposición: Equipo Crónica del pop a la transición 1964/1981" en la Galería Guillermo de Osma (Madrid). Haciendo el recorrido también estaba el artista Alfredo Alcain, a ambos nos dio mucha alegría encontrarnos, como siempre en nuestros recorridos expositivos.

Caminamos por la muestra, disfrutando de las obras para nosotros conocidas, de los dos grandes artistas que formaron el Equipo Crónica: 1964 a 1981 Rafael Solves, Manuel Valdés y Juan Antonio Toledo (este último abandono pronto).

La exposición cuenta con una selección de 19 obras, pintura y pintura sobre cartón piedra.

PINTORES EN EL ANDAMIO O LÉGER Y LOS PINTORES, 1974. Técnica mixta sobre táblex, 78 x 104 cm

El catálogo de la exposición abre con un ensayo de Sergio Rubira: "Historia de la pintura, pintura de historia". Textos de Valeriano Bozal, Tomás Llorens y Guillermo de Osma que dedica a su tío Guillermo Wakonigg, El arte y Equipo Crónica. Colaboraciones del Equipo Crónica con WIlli Wakonigg para Gastón y Daniela. Obras incluidas en la exposición.

EL ACRÓBATA (Boceto para pañuelo estampado), 1972. Gouache sobre papel, 53 x 53 cm

Siempre he sentido preferencia por una de las obras que se encuentra en la exposición la nº 19 "Espectador de Espectadores. 1972, pintura sobre cartón piedra ¡Nos encontramos en mis comienzos!


La exposición se puede visitar hasta el 27 de febrero 2024, muy aconsejable un paseo por ella.

Rafel Solves y Manolo Valdés. Fotografía de Paco Alberola

Documentación Catálogo: Galería Guillermo de Osma, Madrid.

© Mariví Otero 2024

Manuel Otero Rodríguez

JUAN GOPAR

 

Fotografía de Sala. Obra de Juan Gopar.

La galería Álvaro Alcázar (Madrid) nos invita a caminar por la exposición del artista de Lanzarote, Juan Gopar (1958): La isla taller. Hace treinta años de su última muestra en Madrid, en la galería Gamarra y Garrigues. En la muestra podemos ver una colección de pinturas, esculturas y obras sobre papel realizadas en la isla de Lanzarote entre 1994 y 2021.

La isla taller se construye como un ecosistema poético en el que lo real y la imaginación creativa entrelazan sus raíces en una simbiosis fascinante. Como ocurre con los líquenes, esos organismos que surgen de la colaboración entre hongos y algas unicelulares, y que desde unidades mínimas cubren territorios amplísimos, la obra de Gopar reúne lo micro y lo macro, desde la orilla insular a las enormes estancias del cosmos. Se trata de la grandeza de lo breve, que de forma brillante expresó "Espacio" de Juan Ramón Jiménez.

Obra de Juan Gopar.

"Los dioses no tuvieron más sustancia de la que tengo yo", dice el poema de Juan Ramón Jiménez. Pero aquí en La isla taller, el "yo" no es otro que la propia pintura. En las cabañas tituladas Metáforas -En Gopar estas "arquitecturas" deben ser comprendidas como "pintura liberada"- esa idea aparece de un modo rotundo: la forma se encarna en su propio significante. Dice Manuel Padorno: "Hermoso taller el mío: las islas".

Con Gopar caminamos por las islas, también.

Fotografía de sala. Obra de Juan Gopar.

Exposición que se puede visitar hasta el 16 de marzo 2024.

Documentación de la galería.

© Mariví Otero 2024

Manuel Otero Rodríguez.

RAIMUND GIRKE

 

Fotografía de sala. Obras de Raimund Girke.

En el Oratorio de Sant Feliu, Palma de Mallorca, se encuentra la galería KEWENIG la visitamos virtualmente, vamos al encuentro de la exposición: Acentos. Pinturas del artista Raimund Girke (Heinzendorf/ Baja Silesia, 1930- Colonia, 2002). El gesto abstracto, el blanco en el centro y la expansión de la imagen en el espacio de color caracterizan las pinturas de Girke. Después de dos extensas exposiciones individuales en Berlín, KEWENIG ha presentado por primera vez su obra en Palma de Mallorca en colaboración con el patrimonio del artista.

Se pueden ver obras de los años 90, pinturas sobre lienzo y papel. El color blanco es el tema principal de estas obras. Pinceladas gestuales, pero ordenadas, ásperas y libres, trazan la dirección a través del lienzo. Es el blanco el que pasa a primer plano y sigue siendo dominante en interacción con los tonos azules y marrones.

Raimund Girke. Durchdringung Weiss und Blau, 1990. Óleo sobre lienzo. 160x140cm

A través de la pintura de Girke, el blanco se nos aparece como el color que contiene todos los demás colores y al mismo tiempo no lo contiene, como color que es capaz de elevar su propia energía y resplandor a un sujeto material e inmaterial en contraposición a la convivencia con otros colores. El juego de Girke con negro, gris, azul y marrón de diferente intensidad y presencia en el lienzo también revela su intención artística de resaltar analíticamente los elementos ritmicos y procesuales de su pintura.

Raimund Girke, Leyt rítmica, 1996. Óleo sobre lienzo. 200x160cm

Se puede visitar hasta el 15 de marzo de 2024.

Documentación recibida de KEWENIG

© Mariví Otero 2024

Manuel Otero Rodríguez

REVERSOS

 

 Imagen de las salas de la exposición REVERSOS. Foto © Museo Nacional del Prado. 

La tarde de ayer en el Museo Nacional del Prado, caminamos por la exposición "Reversos". Muestra que nos invita a contemplar los cuadros como obra total, más allá de la pintura.  Partiendo de la contemplación de Las Meninas, en la que el reverso del enorme lienzo en la que trabajaba Velázquez ocupa una elevada porción de supreficie, el artista contemporáneo Miguel Ángel Blanco, como comisario de esta exposición, plantea un singular acercamiento a la pintura dando la vuelta a las obras para propiciar en el espectador una relación nueva y más completa con los artistas que han creado las 98 obras seleccionadas.

Imagen de las salas de la exposición REVERSOS. Foto © Museo Nacional del Prado. 

Hasta hoy se han realizado numerosos estudios sobre obras individuales cuyas traseras resultan de interés por una razón, y algunos museos han explorado de manera parcial esta dimensión a través  de pequeñas exposiciones en las que han dado la vuelta a algunas de las obras que poseen.  El Museo del Prado se adentra en ella con la ambición requerida, no solo haciendo una revisión integra del reverso de sus colecciones sino también localizando en algunos de los más importantes museos del mundo ejemplos de cómo se puede enriquecer la apreciación de las obras de arte cuando su contemplación no se limita al frente.

Joven copiando un cuadro Wallerant Vaillant Óleo sobre tabla, 31,6 x 39,5 cm h. 1670 Londres, Guildhall Art Gallery, City of London

Seguimos caminando por las salas A y B del edificio de Jerónimos por -primera vez pintadas de negro- un recorrido abierto que da la máxima libertad a la relación  especial con las obras, sin jerarquías ni ordenación cronológica, dando entrada a artistas contemporáneos como Vik Muñiz, Sophie Calle o el propio Miguel Ángel Blanco con los libros-caja de la Biblioteca del Bosque.

La muestra esta estructurada en capítulos que tratan diferentes aspectos relacionados con las traseras, acogen autores que por vez primera se exponen en el Prado como Van Gogh (1852-1890), Rene Magritte (1898-1967), Lucio Fontana (1899-1968), Pablo Palazuelo (1915-2007), Antoni Tàpies (1923-2012), Michelangelo Pistoletto (1933), José María Sicilia (1954), Ernst Ludwig Kirchner (1880-1983) entre otros.

Al voltear las obras, pervirtiendo así su frontalidad convencional, y al obligarnos a rodearlas asumiendo como espectadores un rol más activo.

Exposición creativa, se puede ver hasta el 3 de marzo 2024.
Fuente: Nota de prensa y fotografías: Departamento del Museo del Prado.

©Mariví Otero 2024

Manuel Otero Rodríguez.