viernes, 20 de abril de 2018

RUBENS. Pintor de bocetos

Retrato de Clara Serena Rubens
Rubens
Óleo sobre lienzo montado en tabla, 33 x 26 cm
h. 1616
Liechtenstein, The Princely Collections, Vaduz-Viena

Pedro Pablo Rubens (1577-1640) es el pintor de bocetos más importante de la historia del arte europeo. Siguiendo los pasos de algunos artistas –muy pocos- de Amberes e Italia. Pintó alrededor de quinientos a lo largo de su carrera artística.

En esta exposición, bocetos al óleo (o simplemente bocetos) significa pinturas realizadas como preparación para otras obras. Algunos le servían a Rubens para elaborar sus ideas sobre la nueva composición, y muchos los pintó para enseñárselo a sus clientes o como guía para sus colaboradores –es probable que en su mayoría cumplieran a la vez las dos funciones. Según su finalidad, pueden ser obras muy abocetadas o muy acabadas, y también pequeñas o relativamente grandes.

La práctica de realizar bocetos al óleo como parte de la preparación de un cuadro se inicio en Italia en el siglo XVI. Artistas como Polidoro da Caravaggio, Beccafumi, Federico Barocci, Tintoretto o Veronés fueron los primeros que utilizaron bocetos pintados al óleo como herramientas para probar sus ideas a la hora de pintar un cuadro. Sin embargo, lo hicieron en muy contadas ocasiones porque utilizaban sobre todo el dibujo para preparar sus obras. Basándose en estos precedentes, la innovadora aportación de Rubens consistió en ampliar ese proceso preparatorio incluyendo sistemáticamente imágenes pintadas al óleo y en soportes más duraderos que el papel. Algunos le servían para elaborar sus ideas sobre nuevas composiciones, y muchos fueron pintados para enseñárselos a sus clientes o como guía para sus colaboradores, según su finalidad, se trata de obras muy abocetadas o muy acabadas, y también  pequeñas o relativamente grandes, diferenciadas del resto de la producción pictórica porque con menos pulidas y detalladas, la capa de pintura es más delgada y con frecuencia se ve la imprimación.

Prometeo
Rubens
Óleo sobre tabla, 25,7 x 16,6 cm
h. 1636
Madrid, Museo Nacional del Prado

Rubens. Pintor de bocetos es una exposición de carácter temático  que, además de llamar la atención sobre el protagonismo del maestro flamenco en la historia del boceto y ayudar a comprender mejor sus peculiaridades como bocetista, ilustra el resultado de una exhaustiva investigación, dirigida por los comisarios de la muestra: Friso Lammertse, Conservador de pintura antigua del Boijmans Van Beuningen Museum, y Alejandro Vergara, Jefe de conservación de Pintura Flamenca y Escuelas del Norte del Museo del Prado, cuyas conclusiones forman el núcleo de la publicación que acompaña la exposición.

Para esta  se han logrado reunir 73 de estos bocetos pintados al óleo entre los que se incluyen cinco bocetos par las Pinturas del techo de la iglesia de los Jesuitas de Amberes de los museos Ashmolean en Oxford (2), Boijmans en Róterdam, la galería Národni en Praga y la Gemäldegalerie de Viena; La Serie de Aquiles, que se completa en la Galería Central del edificio Villanueva donde se expone un boceto propiedad del Fitzwilliam Museum de Cambridge junto a la pintura Aquiles descubierto por Ulises y Diomedes de Rubens y Taller, del Prado; y la Serie de la Eucaristía conservada por el Prado y a la que se une un  boceto procedente del Art Instituto Chicago. Además, hasta completar un total de 93 obras, se pueden contemplar algunos dibujos, estampas y pinturas del propio Rubens que dan contexto a los bocetos.

La caza del león
Rubens
Óleo sobre tabla, 73,6 x 105,4 cm
h. 1615
Londres, The National Gallery
Secciones de la exposición:

Pinturas para el techo de la iglesia de los Jesuitas de Amberes. En 1620 los jesuitas le encargaron a Rubens 39 obras para su iglesia de Amberes. En su mayoría iban a colocar en los techos y, por tanto se verían desde abajo. Los cuadros finales, que en un incendio destruyó en 1718, fueron pintados por Van Dyck y otros ayudantes del maestro. Para preparar este ciclo Rubens realizó pequeños bocetos monocromos, otros en color y más elaborados, en ambos casos al óleo, y algunos dibujos. Los complicados escorzos exigieron un riguroso trabajo previo. Los bocetos más pequeños son estudios de las luces y las sombras. En los más grandes ya está plenamente desarrollado el color.

Los milagros de san Francisco de Paula
Rubens
Óleo sobre tabla, 110,5 x 79,4 cm
h. 1627 - 1628
Los Ángeles, The J. Paul Getty Museum

Serie de la Eucaristía. En la primera mitad de la década de 1620 Rubens diseño veinte tapices dedicados al triunfo de la Eucaristía. Se lo encargó la infanta Isabel Clara Eugenia para el monasterio madrileño de las Descalzas Reales y tratan el tema de la Eucaristía, dogma principal que la archiduquesa defendía como gobernadora de los Países Bajos meridionales. En la creación de tan amplio conjunto intervinieron el pintor, sus ayudantes, la infanta y los tejedores. Rubens hizo dos series de bocetos al óleo, uno mayor que el otro.

En la muestra se expone uno de la serie pequeña, el único que incluye en una misma imagen varios de los tapices proyectados procedente del Art Institute of Chicago, y seis de la  grande propiedad del Prado.

La expulsión de Adán y Eva del Paraíso
Rubens
Óleo sobre tabla, 49,5 x 64,5 cm
1620
Praga, Národní Galerie

Serie de Aquiles. La dedicada a Aquiles es la última serie de tapices que diseñó Rubens. En ella representa, en ocho escenas, diversos episodios de la vida del héroe griego. Rubens preparó el proyecto con dos juegos de bocetos al óleo. Los del primero son más pequeños y menos acabados, y tres de ellos figuran en esta sección de la exposición. Los del segundo juego son de un formato mayor y están más detallados. Estos últimos fueron los modelos para pintar los cartones en los que se basarían los tejedores.

Esta sección se completa en la Galería Central del edificio Villanueva donde se expone un boceto propiedad del Fitzwilliam Museum de Cambridge junto a la pintura Aquiles descubierto por Ulises y Diomedes de Rubens y taller del Museo del Prado, (más arriba comentado).

Tetis introduciendo al pequeño Aquiles en el río Estigia
Rubens
óleo sobre tabla, 44,1 x 38,4 cm
h. 1635
Róterdam, Museo Boijmans Van Beuningen

Pinturas para el techo de la Banqueting House. Rubens pintó estos bocetos como preparación para la decoración pintada del techo de una sala de la Banqueting House –perteneciente al palacio londinense de Whitehall- en el que se celebra el reinado de Jacobo I. Representando la unión de las coronas de Inglaterra y Escocia se conmemora el hecho más importante del reinado de Jacobo: las personificaciones de ambas naciones  están unidad por Cupido, que representa el amor; encima esta Minerva, quien ata las dos coronas. En el segundo, la Paz abraza la Abundancia. Y el tercero una figura que encarna tanto a la Templanza como a la Modestia somete a un vicio que en el programa iconográfico del conjunto se identifica como la Impudicia.

Inglaterra, Escocia, Minerva, Cupido y dos Victorias
Rubens
Óleo sobre tabla, 64,5 x 49 cm
h. 1632
Róterdam, Museum Boijmans Van Beuningen

Bocetos al óleo para la Torre de la Parada. En 1636, Felipe IV le encargó a un Rubens ya mayor que pintara más de sesenta escenas mitológicas para decorar un pabellón de caza conocido como la Torre de la Parada  y situado en las afueras de Madrid. Rubens diseñó todas las escenas en pequeños bocetos al óleo y pintó solo algunas de las obras finales, las demás se confiaron a otros artistas. Realizados con rapidez y con poca pintura, revelan la riqueza del vocabulario pictórico de Rubens y su viva imaginación.


Cierra la exposición el bello retrato, con el que se abre este artículo, de su hija Clara Serena Rubens (1616). Rubens, un barroco muy moderno.


 © Mariví Otero 2018
Asistente: Manuel Otero Rodríguez

Fuentes: Rubens. Pintor de bocetos. Museo Nacional del Prado. Área de Comunicación. Del 10 de abril al 5 de agosto de 2018.

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