jueves, 6 de junio de 2013

Maiko Maeda: ¡Por casualidad!

Maiko Maeda 

Nos encontramos por casualidad, ¡es verdad!, Maiko paso una vez por la galería de la que yo era directora y no estaba, le dijo a mi asistente que volvería que quería hablar con  la directora, volvió ¡claro que volvió! Después de conocerla no me extraña, es muy tenaz. Era finales del mes de Julio de 2008 y escucho  saludar a mi asistente ¡es Vd.! sí, está la directora. Pasa a mi despacho y me dice esta la pintora Maiko Maeda, que pase, le comento ¿no recuerdas las obras que tuvimos en la galería del Louvre Ispahan II, de esta artista? ¡ah, sí!...  ¡la colección de J.S.!... ¡Premio, te has acordado!  Pero voy  al encuentro por casualidad, de esta artista japonesa, Maiko Maeda, a la que hace años quería conocer.

Las obras que yo había conocido y que este coleccionista le compró, fueron de su primera exposición individual en la Galería Macarrón, Junio de 1973. Madrid. Le conté el recorrido que hicieron, estuvieron en Venezuela, Miami y regresaron a Madrid, llegando así a mis manos, Maiko estaba emocionada. He de decir que ella llegó a España en 1969 y vivió en Madrid hasta 1978, se gradúa en la Escuela de Artes y Oficios, estudia en la Academia Peña y aprende pintura al óleo con los maestros Eduardo Peña y José Barranco.
Estas obras me sorprendieron, “Dos mujeres 1973” “Mujer sentada 1973” entre otras…  una figuración de colores fuertes bien trabajados, una forma de trabajar que me recordaba al francés August Macke (Alemania 1887-1914 Francia) “fauves”. Años más tarde esta figuración fue sustituida por composiciones abstractas de vivos colores, utilizando en muchas de ellas el collage. A partir de conocernos, siempre que visita Madrid comemos juntas, vemos exposiciones o charlamos, y vía email nos mantenemos informadas ¡tengo que ir a Kyoto! donde vive, capital imperial de Japón durante 1000 años, para visitar el Monte Kurama, Maiko practica el ritual de escalar esta montaña sagrada a las afueras de Kyoto, para luego cantar un mantra budista en el templo que allí se encuentra, rodeado de una espectacular naturaleza.

Estudio

Desde el monte Kurama al monte Ararat (Armenia, Yerevan donde ha expuesto en la National Gallery de Armenia, en 2006). Dice Maeda, “Una vez pregunté a un pintor famoso cuál de sus obras era la mejor, me contestó: No estoy satisfecho con ninguna, puede que sea la última que haga antes de morir. La razón es porque continuamente dudo, y así seguiré siempre” El ejercicio de Maeda al monte Kurama debe ser una manifestación de su interminable lucha por preguntarse sobre su forma de vida y buscar luz en el mundo de las ilusiones.

Templo del Monte Kuarama
Monte Ararat

Maiko Maeda, nacida en Tokio al  final de la Segunda Guerra Mundial, estudió filosofía y psicología en la Universidad de Gakushuin. Termina en 1968. Pintando desde que era una niña, educada en Tokio, aunque nunca aprende pintura en serio en Japón. Llega a Madrid en 1969, cuando comienza  sus estudios en las Bellas Artes.
Después de su periplo español, en 1981 se marcha a Nueva York. Durante cuatro años continuó estudiando en el Art Student League, con el artista japonés Mr. Minoru Kawabata (Tokio 1911) abstracto, al que ella admiraba. En esta época hizo exposiciones con regularidad, tiene un amplio currículo de exposiciones en diferentes lugares por el mundo.

Esta artista japonesa ciudadana del mundo, pero muy oriental de sentimiento, se trasluce en sus primeras obras más figurativas y años después en sus pinturas abstractas como las actuales. Lo que da profundidad a su trabajo no es sólo su innato sentido del color, sino también la introducción del collage. Papeles teñidos y telas se integran con delicadeza, cubiertos sin límites precisos por acrílico o óleo.





Junto a las influencias del arte europeo y americano, por la obra de Maeda, subyace una corriente oriental. Diría que su obra reciente, está  dentro de lo que llamaría abstracción expresionista,  enigmática y sugerente, gran trabajo matérico es lo que me sedujo hace años cuando llegó su obra a mi encuentro  ¡esa es, Maiko Maeda!. Su e-mail:  maikomaeda_gp@yahoo.co.jp 
El 20 de Mayo inauguró una espléndida exposición en la Galería Orfila, en Madrid (España). Hasta el 8 de Junio de 2013.

© Mariví Otero 2013
Fotos: Mariví Otero.

Paul Klee: Maestro de la Bauhaus



Es la segunda exposición de la Fundación Juan March dedicada al artista suizo, después de la organizada hace ya unas décadas, en 1981, y que fuera la segunda dedicada a Paul Klee en nuestro país. Aquella muestra, que contó con la colaboración del hijo del artista, Félix Klee, la Fundación Klee de Berna y la Galería Beyeler de Basilea incluyó un total de 202 obras entre óleos, acuarelas, dibujos y grabados. Es una de esas exposiciones que he podido disfrutar ¡como siempre cuento!, en la Fundación Juan March, es más, tengo encima de mi mesa el magnífico catálogo de la misma.


Maestro de la Bauhaus está compuesta por 137 obras del maestro suizo (cantón de Berna,1879-1940 cantón del Tesino), entre pinturas, acuarelas y dibujos, junto a un centenar de páginas manuscritas, documentos diversos y fotografías de época, del llamado –legado pedagógico- una selección de las notas de clase de Klee en la Bauhaus. La exposición es el resultado de varios años de trabajo en colaboración con el Zentrum Paul Klee y se apoya en el que quizá sea –después del catálogo razonado del artista- el proyecto de investigación “estructural” sobre el artista más relevante de las últimas décadas: la edición crítica del legado pedagógico de Klee. Con ese nombre se conoce un conjunto de textos tan heteróclito como fascinante, casi 4000 páginas manuscritas en las que Paul Klee recogió sus reflexiones e investigaciones teórico-prácticas –plegadas de llamativos diagramas, esquemas, tablas, escalas de color, construcciones y dibujos-  en torno a la forma pictórica, sus regularidades, sus normas y sus génisis; la geometría, el plano y el volumen; al movimiento, las estructuras de la naturaleza y las de los artificios, las configuraciones plásticas, el ritmo o el color. Se trata, en definitiva, de un conjunto de reflexiones sobre la vida de las formas sin el que no pueden entenderse de manera concluyente ni la teoría del arte ni el propio hacer artístico de Klee, dos ámbitos que  –como es obvio en el caso de un artista- se hacen eco mutuamente (sobre esta cuestión se ocupan las dos comisarias invitadas, Fabienne Eggelhöfer y Marianne Keller Tschirren).

Paul Klee desarrolló todas sus investigaciones con una finalidad decididamente pedagógica. Sus textos tienen un marcado estilo didáctico: son las notas de clase con las que las que el Meister Klee (el “maestro” Klee) preparaba e impartía sus clases en la Bauhaus de Weimar y posteriormente de Dessau, en las que fue docente, junto a Wassily Kandinsky, Lothar Schreyer u Oskar Schlemmer, entre 1921 y 1931. Durante esos diez años Klee preparó sus clases de “Teoría de la forma pictórica” y dejo más de 3900 páginas con notas que denomino en su conjunto, “Teoría de la configuración pictórica”. Fue en la Bauhaus, con la peculiar y novedosa articulación de la enseñanza teórica y práctica, y la ruptura del papel tradicional de las artes aplicadas que caracterizo a esa institución, don Klee desarrolló sus particulares métodos pedagógicos, con los que quería transmitir a sus estudiantes los principios fundamentales de la configuración de la forma, es decir, de lo que hoy llamamos “diseño”. Y aunque no impartía clase a futuros artistas y estaba convencido de que el arte, en suma, no se podía enseñar como se enseñan las disciplinas teóricas o las puras artes aplicadas, su labor docente se desarrolló, como es lógico, al hilo de una reflexión sobre su propia obra pictórica, una obra que, desde entonces, ha influido a enteras generaciones de artistas de todo el mundo.


Paul Klee, después de la Bauhaus, los nacionalistas cierran la Bauhaus de Dessau. Ludwig Mies van de Rohe la seguirá dirigiendo en Berlín como institución privada hasta el verano de 1933. En abril de 1933, tras la toma del poder por los nacionalsocialistas, Klee es despedido de su puesto docente en Dusseldorf. A finales de año emigra con su mujer Lily a Berna. En 1935 empiezan a hacerse notar los primeros síntomas de una grave  en enfermedad (esclerodermia) que durante el año siguiente prácticamente paralizará por completo su actividad artística. En 1937 los nacionalsocialistas difaman el arte de Klee calificándolo de “degenerado” y se incautan de 102 obras suyas presentes en museos alemanes. Quince de ellas se muestran en la exposición Arte degenerado. A pesar de su mala salud, la productividad artística de Klee alcanza un punto culminante en 1939 con 1253 obras. Paul Klee muere el 29 de junio de 1940 en la localidad suiza de Muralto, junto a Locarno, en el cantón del Tesino.


La exposición se compone de  cinco apartados: naturaleza, ritmo, color, movimiento y construcción, mas el legado pedagógico, cronología y un gabinete de consulta. Todo está perfectamente diseñado para seguir el recorrido a través del programa de mano. Además del catalogo, en edición española e inglesa (con las correspondientes versiones para e-book), la Fundación Juan March va editar, como publicación complementaria, las traducciones al español y al inglés, en ediciones semifacsímiles. De su Beiträge zur bildnerischen Formlehre (Aportaciones a una teoría de la forma pictórica [Notas de clases]), los apuntes para sus clases elaborados en 1921-22 y hasta ahora inéditos en ambas lenguas.


Otras actividades en la Fundación Juan March relacionadas con la exposición: El universo musical de Paul Klee. Conferencias: Klee, un Maestro.

Espléndido trabajo de un capítulo muy importante y bastante desconocido de los trabajos del Meister Klee. ¡No te la pierdas!... Del 22 de Marzo al 30 de junio de 2013, Madrid. España.

© Mariví Otero 2013


Bibliografía: Documentación,  Gabinete de Prensa de la Fundación Juan March.
VV.AA.: Paul Klee, Colección Berggruen. Fundación Botín. Santander, 2006.
VV.AA.: Paul Klee. Fundación Juan March. Madrid, 1981. 

La invención concreta: Colección Patricia Phelps de Cisneros

Carlos Cruz-Diez


El pasado sábado 11 de Mayo, una vez más acudí a la visita guiada infantil y juvenil de la Real Asociación Amigos del Museo Reina Sofía para niños de 5 a 16 años. Soy  tutora voluntaria; me gusta, disfruto con el grupo de niñas y niños que me asignan. En esta visita  tenían siete años. Nuestra guía era Elena, licenciada en Bellas Artes, muy creativa. La elección del trabajo fue la obra del maestro venezolano Alejandro Otero (El Manteco, Estado de Bolivar,Venezuela, 1921-Caracas 1990), obras que generan diferentes situaciones  de ilusión visual e inestabilidad óptica, a diferencia de otros artistas abstractos, para quienes la naturaleza plana de la superficie pictórica era fundamental. En Caracas hay una fundación dedicada a su obra.
Alejandro Otero
Como siempre, me acompañaron mis sobrinos Manuel y Mauro. Manuel ya tiene trece años (como hubiese dicho nuestro gran amigo Francisco Plaza Pieri, filósofo) ¡Ya va con los mayores!, el fue su tutor voluntario cuando Manuel tenía cinco años.

Sí, ya ha pasado a formar parte del grupo de los mayores donde tienen como guía ¡al peleón, pero muy responsable Andrew!
La invención concreta, es una exposición que centra su atención en el desarrollo de la abstracción geométrica en Latinoamérica, abarcando un marco cronológico que se inicia en los años treinta y concluye en la década de los setenta del siglo XX. Aunque este tipo de arte abstracto se desarrolló inicialmente en Europa, algunos artistas sudamericanos lo asumieron como lenguaje de un futuro cosmopolita y progresista desde las modernas ciudades de Montevideo, Buenos Aires, Sao Paulo, Río de Janeiro y Caracas. La abstracción geométrica se convierte así en un vehículo de expresión de la emergencia  de un continente que exploraba a mediados del siglo XX nuevas ideas políticas y culturales.

Comisariada por Manuel Borja-Villel, director del Museo Reina Sofía y Gabriel Pérez-Barreiro, director de la Colección Patricia  Phelps de Cisneros, la muestra se compone de aproximadamente de doscientas obras -pintura, escultura, instalación, collage y obra gráfica-; muchas de estas obras nunca se han visto en España con anterioridad y una veintena proceden del MoMa de Nueva York, institución a la que fueron donadas por la Colección Patricia Phelps de Cisneros.
La exposición nos permite apreciar gran diversidad de propuestas dentro del periodo comprendido entre la década de los treinta y de los setenta. Hay artistas que concebían la abstracción como un sistema para crear relaciones interpersonales mediante objetos manipulables o algunos para los que las proporciones matemáticas constituyeron una metáfora para la estructura subyacente del universo. Para otros, el ritmo visual y la repetición  crean efectos ópticos y luminosos, y los hay que se valen del lenguaje para establecer diálogos con la cultura del pasado. Son distintas intenciones, formas diferentes de concebir el arte y su papel en la sociedad.
Cildo Meireles
Muchos de los autores de estos trabajos se ocuparon de escribir las teorías que mantenían sobre estas cuestiones en artículos, revistas y polémicos manifiestos en los que se proclamaban las características de un nuevo lenguaje artístico que, a pesar de sus aspiraciones universales, se dotaba de un significado diferente en relación con cada contexto.

Esta exposición no incluye sólo obra de artistas latinoamericanos, sino que además están representados artistas europeos y norteamericanos que fueron especialmente importantes en este contexto, ya que muestran cómo, a partir de relecturas o malinterpretaciones, las diversas manifestaciones de la modernidad latinoamericana, se distancian de la europea o incluso como pueden antagonizar entre sí.
Lygia Clark

Lygia Pape
Artistas presentes en la exposición: Josef Albers, Geraldo de Barros, Max Bill, Pol Bury, Lygia Clark, Waldemar Cordeiro, Carlos Cruz-Díaz, Willys de Castro, Hermelindo Fiaminghi, Héctor Fuenmayor, Gego (Gertrud Goldschmidt), Alfredo Hlito, Gyule Kosice, Judith Lauand, Raúl Lozza, Tomás Maldonado, Mateo Manaure, Cildo Miereles, Juan Melé, Juan Alberto Molenberg, Piet Mondrian (uno de los principales protagonistas del arte abstracto en América Latina, donde gracias a la difusión de las imágenes de su obra, era un icono), Hélio Oiticica, Alejandro Otero, Lygia Pape, César Paternosto, Rhod Rothfuss, Luiz Sacilotto, Mira Schendel, Jesús Soto Joaquín Torres-García, Franz Weissman.

Piet Mondrian

Las obras que configuran esta exposición se agrupan al margen de su lugar y año de creación, atendiendo a criterios de afinidad de los autores desde los cuales entender que la cercanía en el uso del lenguaje artístico no se traduce necesariamente en una finalidad común respecto al objetivo de su arte. Todos estos trabajos proceden de la Colección Patricia Phelps de Cisneros, una  de las más importantes en lo que al arte contemporáneo latinoamericano se refiere, con la que el Museo Reina Sofía ha establecido un convenio de colaboración.
Con esta esplendida colección unos conocerán y otros recordaran la abstracción geométrica, que se basa en la idea de que la geometría y la matemática son sistemas con un significado inherente, lo que deriva de la filosofía de Platón y Pitágoras.
Jesús Soto
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, hasta el 16 de Septiembre, 2013/ Edificio Nouvel, planta 0.

Este sitio ofrece un acercamiento a la muestra de manera interactiva y lúdica, brindando la oportunidad de acceso a las obras de arte expuestas, material de apoyo, así como información sobre los artistas.

© Mariví Otero 2013

Bibliografía: El catálogo de la exposición. El Museo Reina Sofía ha editado un catálogo a modo de “libro de ensayo”, que incluye introducción de Patricia Phelps de Cineros, y texto de los comisarios y VV.AA., Además, la publicación incluye reproducciones de las obras presentes en la muestra.
Cereceda, C. “La invención concreta. Colección Patricia  Phelps de Cisneros”. 29.1.2013. Entretanto Magazine.