En
CaixaForum paseamos por esta exposición cuyo título remite al periodista
político y crítico literario alemán C.W. Ceram, conocido por sus obras de
divulgación sobre arqueología y, en especial, por el libro Dioses, tumbas y
sabios. Como refiere la comisaria Angels de la Mota, la muestra, en cierta
forma, de arqueología; más concretamente, de un tipo de arqueología -de
artistas- puesto que partiendo de las obras de diez artistas de la Colección de
Arte Contemporáneo Fundación “la Caixa” propone un recorrido a través de los
objetos que esos artistas han ido reuniendo en sus casas o en sus estudios o
talleres a lo largo de los años. Así, -esas piezas procedentes de culturas
no occidentales y obras de arte poco conocidas para el público forman o han
formado parte de sus colecciones más personales y, a través de esta exposición,
desvelan, como si de un yacimiento arqueológico se tratase, los estratos
ocultos de sus vidas-, subraya de la Mota.
Uno de
los principales estímulos para el desarrollo del arte del siglo XX fue el arte
africano. Los artistas de las primeras vanguardias estaban completamente
fascinados por él y a principios de siglo empezaron a coleccionar aquellos
objetos que dejarían huella en sus obras. Wendy A. Grossman defendió que el descubrimiento
de los objetos africanos por parte de la vanguardia europea y americana es
esencialmente la historia de la modernidad misma. Así, los talleres de artistas
como Vlaminck, Matisse, Apollinaire y Picasso se llenaron de objetos africanos
considerados como piezas artísticas.
Las
colecciones de los artistas son particularmente valiosas por su capacidad de
revelarnos aspectos relacionados con el imaginario del creador, sus referentes,
sus intereses y obsesiones, sus procesos creativos y, en definitiva, su propia
obra.
La
exposición muestra obras de Rosa Amorós, Miguel Barceló, Georg Baselitz,
Luis Feito, Joan Hernández Pijuan, Manolo Millares, Joan Miró, Susana Solano,
Hiroshi Sugimoto (fotógrafo) y Antoni Tàpies, todas ellas, del fondo de
la colección de Arte Contemporáneo Fundación “la Caixa”, y se acompaña, por el
otro, de piezas de las colecciones particulares de los citados artistas,
generando así un diálogo de mágica intensidad.
En la muestra nos paramos a ver las colecciones de arte de tradición no europea, ofreciendo como contrapunto la búsqueda de uno mismo en el otro, así como la mirada del otro en si mismo. De este modo, si en el caso de Joan Miró y Antoni Tàpies presentamos la mirada hacia el otro a través del arte oriental, en el caso de Hiroshi Sugimoto descubrimos una muestra de su colección de antiguos objetos religiosos japoneses como forma de mirar los objetos de su propia tradición.
La
colección de Susana Solano es también la búsqueda del otro, en este
caso, a través de sus viajes. Luis Feito, además, se convierte en otro.
Contrariamente, Joan Hernández Pijuan nos muestra la búsqueda de si mismo en el
otro.
La
colección de Rosa Amorós se distingue por ser una mirada compartida con
su pareja, el editor Gustau Gili; ambos reúnen un conjunto a cuatro
manos que alcanza casi lo universal. Georg Baselitz, sin embargo, se
concentra en un área muy determinada de África orienta para reunir una valiosa
colección, muy personal. Como en el caso de Sugimoto, la mirada de Miguel
Barceló se dirige también a la tradición propia, en este caso a la europea,
pero sin eludir objetos no europeos. La de Manolo Millares, por su parte,
representa la búsqueda de sus orígenes en una cultura arcaica, aislada y ya
extinta, la de los pueblos aborígenes canarios.
Así
pues, la comparación entre las distintas colecciones y la relación entre la
obra y la colección de cada artista nos llevará a disfrutar de una espléndida
experiencia.
La comparación
entre las distintas colecciones y la relación entre la obra y la colección de
cada artista nos invitan a identificar diferentes maneras de coleccionar y
abordar la elección de objetos para hacer evidentes las motivaciones que
subyacen tras dicha elección. La contemplación de la colección y la obra de los
artistas permite indagar en la relación entre el coleccionista y sus objetos, y
preguntarnos si, en palabras de Walter Benjamín, es el coleccionista el que
habita en las cosas o si, por el contrario, son las cosas las que están vivas
en él.
Fuente: Dioses, magos y sabios. Las colecciones privadas de los artistas. CaixaForum, Madrid. Comisariado: Maite Borrás y Ángeles de la Mota. Se puede visitar hasta el 20 de agosto 2023. Prensa CaixaForum: Documentación y fotografías.
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