martes, 12 de noviembre de 2024

SAUL STEINBERG, artista

 

Fotografía de sala. Saul Steimberg.

En la Fundación Juan March (Madrid) una vez más, vamos al encuentre de un gran artista SAUL STEINBERG (Rumanía, 1914- Estados Unidos, 1999). Se trata de la primera retrospectiva completa dedicada a este artista en España. La muestra presenta todas las facetas del artista a lo largo de su vida con cerca de 400 piezas, procedentes de distintas colecciones particulares e instituciones europeas y americanas.

Con esta exposición, la Fundación Juan March se convierte en la institución de referencia para el estudio de Steinberg en España, tras aceptar la donación de unas 115 obras y documentos de la Saul Steinberg Foundation de Nueva York.

Saul Steinberg 
New York Taxis [Taxis de Nueva York], 1977 
Collage, tinta, lápiz y acuarela sobre papel 
57,8 × 34,9 cm 
Colección Carol y Douglas Cohen 
© The Saul Steinberg Foundation / VEGAP, Madrid, 2024 

Un escritor que dibuja.

Nacido en Rumania, Steinberg se formó como arquitecto en Italia durante su juventud. El crecimiento antisemitismo le obligó a abandonar su país natal. Huyó a Italia, donde las leyes antisemitas de Mussolini lo forzaron a abandonar Europa. Sin documentación y con dificultades, consiguió llegar a Estados Unidos, donde comenzó a colaborar con The New Yorker, una relación profesional que duró 50 años.

Fotografía de sala. Saul Steimberg.

Steinberg escogió y transformó el dibujo como un medio de expresión artística, pero su obra va más allá: el ingenio y el juego de imágenes se traslada a otros medios menos populares, pero claves en su producción, como la pintura, la gráfica, el collage, el fotomontaje, hasta llegar a dibujar en tres dimensiones, Sus murales, junto con sus portadas del New Yorker y algunas de sus series más célebre, se incluyen en esta retrospectiva.

Fotografía de sala. Saul Steimberg.

En 1946. Su obra se expuso en el Museo de Arte Moderno de Nueva York junto a los otros artistas como Isamu Noguchi o Robert Motherwell. “No pertenezco del todo al mundo del arte, ni al de las viñetas, ni al de las revistas, por eso el mundo del arte no sabe muy bien donde situarme”, escribió entonces Steinberg. Su obra se consagró tanto en los medios de comunicación como en los museos de arte contemporáneo de primera línea.

Saul Steinberg 

Still Life Chair [Silla bodegón], 1981 

Lápiz, cera y madera sobre madera 

90,2 × 30,5 × 25,4 cm 

Galerie Claude Bernard, París 

© The Saul Steinberg Foundation / VEGAP, Madrid, 2024 

Admirador de Nikolai Gógol y de su teatro del absurdo, Steinberg sintonizó con algunos artistas e intelectuales contemporáneos como Samuel Beckett o Alberto Giacometti y con algunos rumanos exiliados como Emil Cioran, Constantin Brancusi o Eugène Ionesco. Con quien compartía agudeza e inteligencia. En ese espacio entre la escena y el libro puede situarse buena parte de su obra.

foto

El crítico Herold Rosenberg afirmó que Steinberg emergió entre los artistas americanos de la postguerra y revolucionó la pintura y la escultura introduciendo el nuevo tema del “misterio de identidad individual”. Así lo constata una de sus series más célebres en torno a la identidad del emigrante, que se expone en esta muestra: Las rúbricas.

Saul Steinberg 
Bombing, Nuremberg [Bombardeo, Núremberg], c. 1945  
Tinta sobre papel  
38,1 × 59,1 cm  
The Estate of Michael K. Vlock 
© The Saul Steinberg Foundation / VEGAP, Madrid, 2024 
Foto: Jenny Gorman

La muestra cuenta con Alicia Chillida como comisaria invitada en un equipo curatorial formado por Manuel Fontán del Junco, Aida Capa y Francesca Pellicciari como asesora especial. Está acompañada de un catálogo profusamente ilustrado, que incluye textos históricos como el publicado por Harold Rosenberg en su primera exposición monográfica en 1978 en el Whitney Museum de Nueva York, y ensayos de otros investigadores como Sheila Schwartz o María Teresa Muñoz.

Mariví Otero

Manuel Otero Rodríguez

Fuente: “Saul Steinberg, artista” Fundación Juan March. Del 18 de octubre al 12 de enero de 2025. Documentación y fotografías: Comunicación y Experiencia Fundación Juan March: Ana Ramírez García- Mina.

SUBIRACHS. En esencia. Esculturas y dibujos (1951-1996)

 

Contrapeso. 1961 - 1962. Piedra y mármol. Pieza única. 32 x 28 x 13 cm

En la Galería Leandro Navarro, la exposición Subirachs. En esencia. Esculturas y dibujos. 1951-1996.Tras su paso por Barcelona de mayo a julio de 2024 en la Galería Arturo Ramón (conmemoración del décimo aniversario del fallecimiento del artista Josep M. Subirachs (Barcelona, 1927-1914). Sumándose a esta conmemoración la Galería Leandro Navarro.

Primer proyecto de la escultura monumental “Evocación marinera” 1958. Bronce P.A.. Edición de 3 ejemplares + 1 P.A. 37 x 32 x 17 cm

La muestra que visitamos ha sido adaptada para la Galería Leandro Navarro, por los comisarios de la exposición, Conxita Oliver y Joan Gil Gregorio, seleccionando 18 esculturas y 7 dibujos y acotado el período temporal de 1951 a 1966. Madrid fue una ciudad muy cercana a Subirachs, recordamos la gran escultura que forma parte del Museo de Arte Público del Paseo de La Castellana: “Al otro lado del muro” (1972). Un lugar para visitar en Madrid.

José María Subirachs. Al otro lado del Muro, 1972. Hormigón y piedra caliza. Museo de Arte Público de la Castellana, Madrid.

Escriben los comisarios en el catálogo de la muestra:

“La muestra arranca a principios de los años cincuenta, tan pronto como sus descubrimientos plásticos, invenciones formales y experiencias constructivas, rompen con el academicismo clasicista de raíz mediterránea, derivado de su aprendizaje junto al escultor Eric Monjo (1942-1947), y de la profunda maestría recibida por parte de Enric Casanovas (1882-1948), con quien trabajó transitoriamente porque, desgraciadamente, el escultor noucentista moría en enero de 1948. Pero, este legado le mantendrá a lo largo de su trayecto artístico por un enfoque de compensación y de orden en el que resolverá todas sus obras”.

Hierro. 1957. Hierro soldado y mármol. Pieza única. 275 x 99 x 87 cm

“Uno de los grandes acontecimientos que impacto en su arte fue el viaje a París en 1951, becado por el Círculo Maillol del Instituto Francés, donde descubre las corrientes vanguardistas internacionales y especialmente el escultor británico Henry Moore. Enseguida nos damos cuenta de que en este momento se  mantienen citas que conservan cierta tradición clásica y que los inicios de la década de los cincuenta representan un punto de inflexión porque realiza obras de un cierto hieratismo vinculado al estilo del antiguo Egipto -como dice Lourdes Cirlot-, trabajando al unísono en planteamientos como los bronce “Maniquí-Ídolo”(1951), “Figura sentada (1953), así como el dibujo “Esboza de Maniquí-Ídolo” (1953); un torso acéfalo terminado en cinco apéndices (brazos, pecho, y cuello) que parecen elevarse como una estrella mística, en una “transformación gótica” (expresión de Corredor Matheos) y del que surgió un espléndido bronce un año después. De la misma manera, las tintas “Mujer sentada (1953) y “Mujer” (1953) están impregnadas de un sentido majestuoso de deformación organicista que se encuentran a medio camino entre la realidad y una irrealidad de carácter metafísico”

Esbozo de Maniquí-Ídolo, 1953. Tinta sobre papel, 26 x 11 cm


Maniquí-Ídolo, 1951. Bronce 4/9, 38 x 14 x 8 cm.

Tras dedicar casi veinte años (1987-2005) a la fachada de la Pasión del templo de la Sagrada Familia de Barcelona (de Gaudí), Subirachs considera que su faceta escultórica ha terminado e inicia una nueva etapa en la que el medio de expresión es la pintura. Artista polifacético, además de la creación tridimensional de Subirachs se expresa también mediante otras técnicas, como el dibujo, la obra gráfica la ilustración de libros o la acuñación de medallas.

Subido en un andamio, Subirachs realiza los últimos retoques en una de las figuras del grupo del entierro en la fachada de la Pasión del templo de la Sagrada Familia de Barcelona.
Fotografía: Joan Iriarte, 1991. Cortesía del Espai Subirachs.

José María Subirachs, es uno de los grandes escultores españoles, quien evolucionó del expresionismo hacia la abstracción, en un proceso hacia un estilo personal.

Mariví Otero

Manuel Otero Rodríguez

Fuente: “Subirachs en esencia. Esculturas y dibujos (1951-1996). Galería Leandro Navarro. Catálogo y comisarios de la muestra Conxita Oliver y Joan Gil Gregorio. 30 de octubre al 5 de diciembre 2024. Documentación y fotografías: Prensa de la Galería, Esther Rodríguez. Video de Íñigo Navarro.

EL TALLER DE RUBENS

 

Imagen de la sala de la exposición “El taller de Rubens.” Foto © Museo Nacional del Prado. 

Si yo hubiese pintado el cuadro sin ayuda, hubiese costado el doble”. Rubens, 1621.

Estamos en el Museo Nacional del Prado en la sala 16 B junto a la Galería Central del edificio Villanueva, en la exposición “El taller de Rubens”, está compuesta por más de treinta obras que incluyen pinturas realizadas por el maestro, otras pintadas por sus ayudantes y otras, resultado en diferentes grados de la colaboración entre estos y aquel.

Hélène Fourment con sus hijos Clara-Johanna y Frans Pedro Pablo Rubens Óleo sobre tabla h. 1636 París, Musée du Louvre, Département des Peintures

Junto a estas pinturas está instalado una escenificación del taller del pintor, que incluye todas las herramientas necesarias para su trabajo, así como algunos elementos que evocan a la persona de Rubens, como una capa y un sombrero inspirados en retratos suyos, todo ello impregnado del olor de la trementina, uno de los más presentes en los antiguos talleres.

Imagen de la sala de la exposición “El taller de Rubens”. Foto © Museo Nacional del Prado.

La exposición esta comisariada por Alejandro Vergara, jefe de Conservación del Área de Pintura flamenca y escuelas del norte, se centra en uno de los más prolíferos y exitosos, el de Pedro Pablo Rubens (1577-1646).

El taller de Rubens

Los pintores europeos de la Edad Moderna trabajaban en talleres (en castellano se denominaban “obradores”) y se valían de múltiples colaboradores. Esta exposición se centra en uno de los más prolíficos y exitosos, el de Pedro Pablo Rubens (1577-1640). En esta sala se muestran cuadros realizados por el maestro, otros pintados por sus ayudantes y algunos otros. Es importante recordar que todos los cuadros que salían del taller de Rubens eran productos de su marca. A pesar de ello, sus contemporáneos, y él mismo, valoraban más los originales pintados enteramente por el maestro que los de taller. En esto, la pintura de Rubens es un producto similar al de algunas marcas de moda o estudios de arquitectura de la actualidad.

Aquiles descubierto por Odiseo y Diomedes Pedro Pablo Rubens y taller (¿Anton van Dyck?) Óleo sobre lienzo h. 1617-18 Madrid, Museo Nacional del Prado

Para acercarnos al taller donde Rubens pintó sus cuadros (la mayor parte, en Amberes), hemos escenificado una simulación basada en imágenes de talleres contemporáneos. Aunque estas, más que documentos veraces, buscaban dignificar la profesión del pintor apelando a su elegancia (el propio Rubens se autorretrató en varias ocasiones sin incluir referencia alguna a su profesión) nos permiten imaginar cómo eran los lugares donde se pintaba.

Filopómenes descubierto Pedro Pablo Rubens y Frans Snyders Óleo sobre lienzo h. 1609-10 Madrid, Museo Nacional del Prado

En obras como la estampa Color Olivi de Johannes Stradanus o la Alegoría de la pintura de Jan Brueghel el Joven vemos a equipos de artistas dedicados a diferentes labores, desde la preparación de los soportes, pinceles y colores hasta la pintura de los cuadros. Los talleres eran los espacios donde los primeros desempeñaban su oficio. Eran también los lugares donde se desplegaba esa maravillosa empresa que es la creación artística.

Alegoría de la pintura Jan Brueghel el Joven (según Jan Brueghel el Viejo y Frans Francken el Joven) Óleo sobre cobre h. 1625-30 Courtesy of the JK Art Foundation

Seguimos recorriendo la exposición, Dos versiones de un retrato de Ana de Austria. Uno de estos retratos de la reina de Francia Ana de Austria (1601-1666) lo pintó Rubens hacia 1622, durante una estancia en París. El otro es una copia hecha en su taller. Era habitual en la época que los pintores realizasen varias versiones de sus cuadros, en especial si se trataba de retratos de personal ilustres. Es importante tener en cuenta que todos los cuadros que salían del taller de Rubens, incluidas las copias, eran considerados productos de su marca.

Ana de Austria, reina de Francia Pedro Pablo Rubens Óleo sobre lienzo h. 1622 Madrid, Museo Nacional del Prado . Ana de Austria, reina de Francia Taller de Pedro Pablo Rubens Óleo sobre lienzo h. 1622-25 Viena, colección particular

Un cuadro de Rubens y otro de un ayudante:

“Saturno devorando a un hijo” Pedro Pablo Rubens. 1636-39. Óleo sobre lienzo. Museo Nacional del Prado.

Demócrito, el filósofo que ríe. Taller de Pedro Pablo Rubens. 1636-39. Óleo sobre lienzo. Museo Nacional del Prado.

Demócrito, el filósofo que ríe Taller de Pedro Pablo Rubens Óleo sobre lienzo 1636-39 Madrid, Museo Nacional del Prado. Saturno devorando a un hijo Pedro Pablo Rubens Óleo sobre lienzo 1636-39 Madrid, Museo Nacional del Prado

Estos cuadros pertenecen a una serie de más de sesenta encargos por el rey Felipe IV (1605-1665) para un pabellón de caza, la Torre de la Parada. Todos fueron diseñados por Rubens, pero solo pinto algunos personalmente. Demócrito es obra de un ayudante. En la zona de los muslos y las rodillas, por ejemplo, la plasmación del volumen no es convincente. Cuando el ayudante terminó su labor, Rubens añadió unos toques finales, sobre todo en la túnica roja (Se distinguen por su tono claro en intenso, en torno al antebrazo). Así corrigió la estructura de los pliegues y dotó de vitalidad a la imagen.

Mercurio y Argos Pedro Pablo Rubens y taller Óleo sobre lienzo 1636-39 Madrid, Museo Nacional del Prado

El objetivo de esta muestra es mostrar, a través de uno de los pintores más prolíficos y exitosos de la Edad Moderna: Pedro Pablo Rubens, cómo los pintores europeos trabajan en talleres y se valían de múltiples colaboradores.

La exposición incorpora también un vídeo en el que se recrea la forma en la que Rubens y sus ayudantes realizaban un cuadro.

Mariví Otero

Manuel Otero Rodríguez

Fuente: “El taller de Rubens”. Museo Nacional del Prado. Hasta el 16 de febrero 2025. Documentación y fotografías. Área de comunicación del Museo.

Un paseo botánico por el Prado

 

Bodegón con alcachofas, flores y recipientes de vidrio Juan van der Hamen Óleo sobre lienzo, 81 x 110 cm 1627 Madrid, Museo Nacional del Prado. Sala 010B

Sigo por el Museo Nacional del Prado "Un paseo botánico por el Prado", es una invitación a descubrir más de 40 especies botánicas representadas en su colección.

García de Medici Bronzino Óleo sobre tabla, 48 x 38 cm Hacia 1550 Madrid, Museo Nacional del Prado. Sala 049

Este nuevo itinerario nos propone, hasta el 30 de marzo de 2025, un acercamiento a su colección permanente a través de un itinerario expositivo, creado por Eduardo Barba Gómez, jardinero e investigador botánico en obras de arte, en el que se muestra cómo la botánica es una parte relevante del relato.

Descanso en la huida a Egipto Patinir Óleo sobre tabla, 121 x 177 cm 1518 – 1520 Madrid, Museo Nacional del Prado. Sala 055A

El itinerario recorre un amplio abanico temporal, desde la escultura romana hasta comienzos del siglo XVIII, para  descubrir cómo en la pintura, la representación de flores y plantas nos pueden hablar de la simbología mitológica, religiosa, nobiliaria o costumbrista para transmitir a la escena cualidades que les son propias.

Mujer en el baño (¿Diana de Poitiers?) Taller de François Clouet Óleo sobre tabla de madera de roble, 92,4 x 70 cm Hacia 1566 Madrid, Museo Nacional del Prado. Sala 052B

Las diversidad, y riqueza de las colecciones del Prado hacen posibles esta nueva aproximación que permite descubrir más de 40 especies botánicas en una selección  de 26 obras de autores tan significativos como Patinir, Fra Angelico, Tiziano, Velázquez, Rubens o Zurbarán.

Documento y fotografías: Área de Comunicación del Museo Nacional del Prado.

© Mariví Otero 2024

Manuel Otero Rodríguez

LA PROCESIÓN DE GIGANTES EN BRUSELAS. Museo Nacional del Prado

 

La procesión de los gigantes en Ommegang en Bruselas el 31 de mayo de 1615. David Noveliers. Óleo sobre lienzo, 119 x 327 cm. 1616. Madrid, Museo Nacional del Prado

De visita en el Museo Nacional del Prado ha incorporado una obra de gran importancia para la colección encargada por los Archiduques Alberto de Austria e Isabel Clara Eugenia:

"La procesión de gigantes en Bruselas el 31 de mayo de 1615" es una obra monumental realizada en 1616 por David Noveliers, que trabajó para la corte de los Archiduques en Bruselas.

La incorporación de este cuadro a la colección del Prado tiene un significado especialmente enriquecedor porque forma parte de una serie de ocho lienzos. Se trata de obras monumentales y de gran valor artístico e incluso antropológico, por los temas representados, realizadas por pintores de una de las cortes más relevantes para el coleccionismo de pintura europea a principios del siglo XVII. La existencia de otras versiones tempranas de esta serie muestra de la importancia que tuvieron desde el momento de su realización.

Adquirida por el Ministerio de Cultura con destino al Museo Nacional del Prado.

Documentación y fotografía: Área de Comunicación del Museo.

© Mariví Otero 2024

Manuel Otero Rodríguez