Caserío de Zabalaga, siglo XVI. ©Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesion Chillida y Hauser & Wirth. Foto Mikel Chillida
Es
el título de la muestra retrospectiva que el caserío Zabalaga acoge con motivo de la reapertura de Chillida Leku. La exposición comisariada por Ignacio Chillida y el
equipo de investigación del museo, reúne más de noventa piezas, trazando un
completo recorrido que abarca desde finales de las década de los 40 –unos años
marcados por la figuración- hasta el año 2000, pasando por el descubrimiento
del hierro como objeto de su trabajo y el desarrollo del personal lenguaje de Eduardo Chillida (San Sebastián,
1924-2002, San Sebastián).
Las obras de esta
primera exposición proceden no solo de la Sucesión de Eduardo Chillida, sino
también se incluyen piezas provenientes de préstamos de museos, instituciones y
colecciones privadas que rara vez han sido expuestas anteriormente. Es el caso
de las relevantes esculturas de hierro Deseoso
(1954, procedentes de Fundación La Caixa) y Del plano oscuro (1956, procedente
de la Fundación ICO, depósito Museo Reina Sofía), además de varias piezas
destacadas como Hierros de temblor (1957), Yunque de sueños VII (1959) o
Buscando Luz III (1997).
Lotura XXXII,1998, acero Corten ©Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesión Chillida y Hauser & Wirth. Foto Iñigo Santiago
La
muestra reúne obra en hierro, granito, alabastro, yeso y papel, sin dejar de
lado las series significativas como las Gravitaciones
(esculturas en papel donde el relieve y el vacío cobran especial importancia) y
las Lurras y Óxidos (piezas elaboradas con tierra chamota). Para
contextualizar las obras, en la muestra se puede descubrir también importante
material de archivo en el que se incluyen fotografías, manuscritos originales,
correspondencia o catálogos de exposiciones de los primeros años de su
trayectoria artística. Todos ellos pertenecen al archivo de Eduardo Chillida,
conservado de forma permanente en el museo.
Vista de la exposición Eduardo Chillida. Ecos ©Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesión Chillida y Hauser & Wirth. Foto Gonzalo Machado
La
exposición está concebida en orden cronológico, de forma que la visita supone un
viaje a la vida y trayectoria de Eduardo Chillida. El recorrido se
desarrolla a lo largo de distintas etapas, definidas en gran medida por los
materiales y técnicas utilizados en cada una de ellas tal y como reflejan los
títulos de las distintas partes de la exposición: 1948-1951 París, primeras esculturas y yeso; Retorno al País Vasco:
primeras esculturas en hierro; Ilarik y los Yunques de sueños; Esculturas de alabastro,
luz arquitectura; Lurrak y Óxidos; Proyectos públicos y Obra en papel: dibujos,
collages, grabados y Gravitaciones.
Vista de la exposición Eduardo Chillida. Ecos ©Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesión Chillida y Hauser & Wirth. Foto Gonzalo Machado
La
muestra, además, se completa con una sección dedicada a la serie Peine del viento, una de las más
emblemáticas y significativas creaciones del escultor. Esta serie será la
protagonista del primer número de coleccionables que se editará a partir de la
reapertura del museo.
Peine del viento XV en San Sebastián. © Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesión de Eduardo Chillida y Hauser & Wirth. Foto Català Roca
El título de la exposición remite a la escultura Oyarak (Ecos, hierro,
1954), una pieza que se expone en la planta baja del caserío. La palabra “ecos”
alude a la idea de repetición, íntimamente ligada a la forma de trabajar de
Eduardo Chillida, centrada en la relación de series que partían de un mismo
concepto. El nombre Ecos evoca también a la propia sonoridad de la obra del
escultor, que materializa sonidos que se desplazan en el espacio.
Vista de la exposición Eduardo Chillida. Ecos ©Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesión Chillida y Hauser & Wirth. Foto Gonzalo Machado
Archivo personal y Documentos
A lo largo de toda la exposición se
presenta una selección de documentos personales procedentes del Archivo Eduardo
Chillida, que se encuentra en depósito en el museo. Fotografías de época,
cartas manuscritas, documentación y catálogos apoyan el recorrido vital del
artista que se muestra a lo largo de la exposición.
Entre los documentos más destacados se
encuentran fotografías de infancia y juventud, documentos gráficos de su
participación en la Bienal de Venecia en 1958, escritos nunca antes expuestos
sobre el proyecto para Tindaya o cartas personales a otros artistas
contemporáneos, como Pablo Palazuelo, que sumergen aún más al visitante en el
universo artístico y filosófico de Eduardo Chillida.
Chillida y Pili en Grasse, 1985, ©Zabalaga Leku. San Sebastián, VEGAP, 2019. Sucesión de Eduardo Chillida y Hauser & Wirth. Foto Hans Spinner
Chillida Leku, es un museo de autor, un
lugar para visitar.
© Mariví Otero. 2019.
Manuel
Otero Rodríguez
Fuente: Chillida Leku.
Dossier de Prensa e imágenes. Acerca Comunicación: Cristina Ruiz y Enrique
Llanos, prensa.
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